Trabajan verificentros acatando medidas preventivas contra el Covid-19
Las unidades de verificación vehicular, laboran bajo los esquemas sanitarios que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales de Hidalgo (SEMARNATH) ha indicado, para asegurar la salud del personal y de los conductores que acuden a realizar su verificación.
Geovanny Lemus Sosa, trabajador de la unidad de verificación número 33, explicó que desde hace varias semanas toman las medidas sanitarias necesarias, que son, el uso de cubre bocas en todo el personal, el uso de guantes, aplicación de gel anti bacterial a la entrada del establecimiento entre otros.
“Al llegar un vehículo, le ofrecemos gel en las manos del conductor antes de recibir los papeles de la verificación anterior, después, los técnicos reciben el carro y lo hacen usando guantes, cubre bocas, mientras que con un trapo y desinfectante, limpian el volante, manijas, llaves, palancas, y antes de subir a los autos, la suela de los zapatos se desinfectan con cloro”, explicó Geovanny Lemus.
Explicó que invitan a los propietarios de los autos a que pasen a la sala de espera y si van con acompañantes, se les hace la recomendación que sólo pase uno y los demás deberán de esperar afuera.
Lemus Sosa, espera que la SEMARNATH mantenga abierta las unidades de verificación, pues sus compañeros y él, tienen familias y requieren del trabajo para llevar el sustento.
Además, enfatizó que parar las actividades de las unidades de verificación vehicular, generaría una serie de problemas, la primera: cortar el flujo económico para las familias que trabajan en todos los centros de verificación, y las personas que requieren de ir a la Ciudad de México (CDMX) a consultas médicas u otro trámite importante y esencial, no podrían hacerlo en su automóvil sin su verificación actualizada.
Por su parte, Casandra, trabajadora también de la unidad de verificación 33, agradeció al titular de la SEMARNATH, Benjamín Rico Moreno, el apoyo que han recibido al mantener abiertos estos centros de trabajo, pues tiene una hija y es su única fuente de trabajo.
En Tulancingo, existen ocho centros de verificación, todos con cinco o seis empelados, por lo que la suspensión de actividades perjudicará económicamente al menos a 48 familias.