Convertir a la Rastreadora en Observatorio Radioastronómico es una excelente idea: Creador de la Agencia Espacial Mexicana
Como “excelente idea” calificó Fernando de la Peña Llaca, creador y promotor de la Agencia Espacial Mexicana AEXA, el proyecto que anunció el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, respecto a convertir a la Estación Terrena de Telecomunicaciones en Observatorio Radioastronómico.
De la Peña Llaca, aceptó que desconocía el proyecto, pero celebró y consideró que es una excelente oportunidad para aprovechar la vocación natural que posee Tulancingo, pues cuenta con 15 condiciones únicas que a nivel continente sólo comparte con Perú.
“Desde la instalación de las antenas hasta cuando se propuso como sede de la agencia espacial, hemos estado reconociendo sus condiciones únicas para ser un lugar excelente en comunicaciones espaciales; como un suelo firme que los terremotos no le afectan, clima que no permite que se llenen de salitre los equipos, una cadena montañosa que evita las interferencias de microondas y la ubicación entre el Golfo y el Pacífico, entre otras”, explicó.
Agregó que este proyecto pondría a Tulancingo en un plano mundial y cobraría mucha relevancia en el contexto industrial, por lo que recomendó que se invierta la mayor cantidad de recursos y se involucre a la población y a la industria, para que no se quede como el telescopio milimétrico de la ciudad de Puebla, el cual a pesar de sus dimensiones no ha cumplido con los objetivos trazados.
Actualmente, las antenas de telecomunicaciones siguen con su labor de recibir señal de televisión de Europa y América.
El Tele Puerto Tulancingo, es aún el más importante del país con estas parabólicas de 32 metros de diámetro, pero la carga de trabajo se ha reducido debido a la apertura de las telecomunicaciones, pues empresas como Televisa y Tv Azteca, ya cuentan con sus propios equipos de recepción satelital.
Lo anterior ha reducido la planta de personal, incluso apenas superan la decena de trabajadores, por lo que convertirlas en Observatorio Radioastronómico podría traer un nuevo auge para lo que también se conoce como “La Rastreadora”