Menores de edad, blanco de los antros clandestinos que operan en salones de fiestas
A través de redes sociales se promueven los antros clandestinos, que operan en salones de fiestas y tienen como principal objetivo los menores de edad a quienes ofrecen barra libre de bebidas alcohólicas por una cantidad asequible al bolsillo de los adolescentes.
Ante tal modalidad, tanto autoridades municipales y escolares, han atacado el problema con monitoreo en redes sociales, operativos constantes, concientización, estrecha comunicación con padres y alumnos, y actividades extracurriculares en el caso de las autoridades escolares.
Viridiana Hernández Hernández, titular de la dirección de Reglamentos y Espectáculos, informó que en esta administración se han realizado 32 clausuras a establecimientos con venta de bebidas alcohólicas, ocho de los cuales han sido por venta de bebidas embriagantes a menores de edad, incluidos dos salones de fiestas por ser sorprendidos realizando labores de antro.
En coordinación con la dirección de Reglamentos, el área de Prevención del Delito ha realizado operativos y derivado de reportes ciudadanos, han logrado la clausura de dos salones de fiesta, donde su director, Josué Delgado González, reconoce que el 80 por ciento de asistentes eran menores de edad.
“No son fiestas pequeñas, hemos encontrado alrededor de 250 o 300 jóvenes y el 80 por ciento son menores de edad, localizando mucha evidencia de consumo de alcohol y residuos de marihuana”.
El funcionario, agregó que no ha podido dar con algún organizador de esas fiestas, pues al interrogar a dueños de los salones de fiestas, argumentan que desconocían el tipo de actividad que se realizaría; sin embargo, eso no los ha eximido de sanciones y clausuras, pues deben tener cuidado a quién se lo rentan y para qué.
“Hemos dado en este año unas 38 platicas en escuelas, donde se ha convocado a los alumnos, padres de familia y profesores, para hablar de temas de drogadicción y alcoholismo, principalmente para que puedan identificar focos rojos en las actitudes de sus hijos y sepan identificar los distintos utensilios que se usan en el consumo de drogas, para que lo reporten inmediatamente”, comentó Josué Delgado.
José Rubén Hernández, jefe de los Servicios Regionales de Educación, descartó que se hayan dado casos de estas fiestas en nivel secundaria, pero ha instruido a los directores a que estén en constante comunicación con los padres de familia, pues los alumnos pueden decir que van a una fiesta de la escuela en un determinado salón, sin ser evento del plantel.
“Los padres ya saben que toda actividad que se realiza fuera de las instalaciones educativas, deben ser con previo aviso de la escuela y por escrito”, señaló.
La directora de la Secundaria General 1, Julieta Castelán Cuevas, indicó que el año pasado se enteraron de ese tipo de fiestas, por lo que, de manera inmediata, tomaron medidas preventivas a través de pláticas de concientización con padres y alumnos, exhortando a los tutores a que destinen tiempo a los hijos y no los dejen en manos del internet.
“Desgraciadamente los adolescentes y jóvenes están viviendo mucha soledad, pueden estar en casa con sus padres pero sin comunicación, cada quien está con su teléfono y no le ponen atención a quienes son sus amigos, qué ve en internet, a donde va, etc.”, lamentó Castelán Cuevas.
Dar con los organizadores de estas fiestas no es fácil, pues se escudan en el anonimato de las redes sociales con perfiles falsos, y la complicidad de los mismos adolescentes, sin embargo, tal como lo recomiendan los directivos de la Secundaria General 1, la gran responsabilidad es de los padres, pues ellos deben ser la primer barrera que impida que los menores de edad acudan a esas fiestas